Sobre el primer punto, Almunia estimó que es "muy fuerte" decir que el ciclo de crecimiento de la economía española se está agotando. "Ya gustaría a muchas otras economías europeas crecer al 3,5% como lo ha hecho la economía española en el primer trimestre de 2006 después de haber estado creciendo en los últimos años claramente por encima de la media europea", subrayó. En su opinión, la economía española continuará la actual tendencia en el futuro. "Es cierto que el resto de las economías europeas se recuperan, y por lo tanto la diferencia entre el crecimiento español y la media de crecimiento europeo se reduce, pero no porque la economía española crezca menos", advirtió. Asimismo, negó que haya una desaceleración en el precio de la vivienda en España, sobre todo tras el dato del aumento en un año del 27% del crédito hipotecario. "Hablar de desaceleración en esos términos sería una contradicción. Lo que sí creo es que el crecimiento en el sector de la vivienda en España no es eterno", manifestó. En primer lugar, por el nivel que han alcanzado los precios de la vivienda en España. "En Bruselas, el precio de las casas es la mitad que los de Madrid, y no porque los habitantes de Bruselas tengan la mitad de renta que los habitantes de Madrid", puso como ejemplo. En segundo término, dejó claro que hay una oferta de vivienda suficiente, a pesar de que han subido los tipos de interés --"no mucho y no creo que suban demasiado--, dijo-- y que ha habido un aumento de la población en España fruto, en especial, del incremento de la inmigración. "Por lo tanto, no creo que haya que esperar mayores crecimientos del sector de la vivienda. No veo una situación muy preocupante a corto plazo. Lo que hay que desear es que el ajuste que se va a producir sea gradual y donde no pierdan los que han perdido en otras situaciones con estallidos de burbujas financieras, que son los más débiles o más capacidad de salirse a tiempo de un sector con ciertas incertidumbres de futuro", insistió. Asimismo, aprovechó la ocasión para advertir, al igual que está haciendo el Banco de España y las autoridades y "sin crear incertidumbres ni miedos", que no es previsible que en los "próximos meses ni trimestres" vayan a bajar los tipos de interés. "Más bien lo que se apunta es a una cierta progresión al alza, no brusca", concluyó.
"Sin duda hay un desajuste entre oferta y demanda, un desajuste muy peculiar en el caso español", señaló Solbes en rueda de prensa en París, tras la presentación del informe semestral de Perspectivas Económicas de la OCDE. A preguntas sobre las advertencias repetidas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sobre el riesgo que puede representar el elevado ritmo de encarecimiento de la vivienda en España en los últimos años, explicó que ese desajuste se debe por una parte a que hay un contingente de "vivienda no utilizada" y un mercado de alquiler "estrecho", que el Gobierno intenta estimular desde hace varios meses. El tirón de la demanda, por su parte, tiene que ver con el bajo nivel de los tipos de interés, con las compras de extranjeros no residentes, con la llegada de inmigrantes y con el aumento de las familias que cuentan con menos miembros, argumentó. "Todo esto debe ir ajustándose y espero" que "tengamos una situación más formal", concluyó Solbes. Previamente, el ministro quiso quitar hierro a las advertencias de la OCDE sobre la escalada de los precios de la vivienda, al señalar que en su informe semestral de Perspectivas también alude, en el resumen general a ese mismo problema a otros países, como Estados Unidos, Francia o Irlanda. Solbes destacó que los autores del documento han corregido al alza sus previsiones de crecimiento para la economía española -con respecto a noviembre- hasta el 3,3% este año, después del 3,4% en 2005, mientras que han reducido sus perspectivas para 2007 al 3%. "Son unas buenas perspectivas para España" que además no incorporan el efecto de la reforma laboral recientemente consensuada con la patronal y los sindicatos que "nos permitirá mejorar la competitividad". En términos generales, aventuró que "el menor dinamismo de la demanda interna debería compensarse parcialmente" con un menor deterioro de la balanza exterior. Una alusión al hecho de que la OCDE también se hace eco, al hablar de los desequilibrios financieros internacionales, del déficit de la balanza por cuenta corriente española, que será a finales de 2007 del 9,8% del Producto Interior Bruto (PIB), por encima incluso de la de Estados Unidos, que entonces superará el 7,5%. El ministro español comentó también las advertencias del conocido como el "Club de los países desarrollados" sobre el diferencial de inflación entre España y la media de la zona euro, que es causante de pérdida de competitividad. Señaló que las medidas que recomienda para corregir ese diferencial son introducir más competencia en los mercados o una mayor flexibilidad laboral, que es lo que aporta el último acuerdo. El titular de Economía no olvidó los halagos de la OCDE a la política fiscal española, que ha permitido obtener un superávit de las cuentas públicas del 1,1% en 2005, una cifra que la organización calcula que se repetirá este año. La situación española -indicó- "es algo más cómoda" que en el pasado, como lo muestran los datos de enero.
El informe revela también la divergencia que las reclamaciones posventa presentan en las distintas regiones, de forma que en las grandes ciudades como Madrid o Barcelona el número de quejas supera en hasta un 50% al de las zonas de Levante. Según Acerta, estas reclamaciones se registran pese a que, según sus datos, el 92% de las promotoras encuestadas para realizar el informe asegura que antes de entregar el piso confeccionan junto al futuro propietario una lista de remates y acabados. Además, indican que en el 97% de los casos esta lista queda resuelta antes de que el comprador la ocupe. En cuanto al tipo de quejas, el estudio indica que sólo un 6% se refiere a problemas que afectan a la habitabilidad de la vivienda (humedades o fuga de la calefacción), y que el 94% corresponden a otros aspectos estéticos, en su mayor parte realizados en la última fase de construcción del piso. En concreto, la pintura y las distintas instalaciones (fontanería, climatización, cocina y electricidad, entre otros), constituyen los dos principales motivos de reclamación posventa de viviendas, dado que acaparan la mitad del total de quejas (un 25% cada uno de ellos). Después se situó la carpintería interior, con un 21% del total de quejas; los solares de madera, con el 13% del total, y los solados y alicatados (un 10%). No obstante, Acerta estima que los porcentajes de incidencias no dependen tanto de la calidad de la vivienda como del grado de exigencia de los propietarios de forma que, según el estudio, 'suelen ser más tolerantes cuando la vivienda es más barata'. Además, en su informe, la firma apunta que la prestación de un servicio posventa se ha convertido en un factor estratégico para las promotoras españolas, de forma que, según sus datos, todas las grandes promotoras realizan acciones específicas para detectar problemas o incidencias en la entrega de viviendas.
En abril, los alquileres de la vivienda aumentaron un 0,5 por ciento, nueve décimas por debajo del índice general, que varió el 1,4 por ciento respecto al mes precedente. En lo que va de año, los alquileres se encarecieron el 2,1 por ciento, tres décimas por encima de la inflación acumulada del índice general, que fue del 1,8 por ciento. En línea con el incremento de los últimos doce meses de los alquileres, se comportaron los precios de los servicios para la conservación de la vivienda, que crecieron un 5,1 por ciento. En comparación con marzo, los precios de los servicios se encarecieron en abril el 0,5 por ciento, y en los cuatro primeros meses el 3 por ciento. En cuanto a los materiales para la conservación de la vivienda, los datos del INE reflejan un aumento del 4,6 por ciento en un año, y un alza del 0,9 por ciento sobre el mes anterior. Hasta abril, esta partida se incrementó un 3,1 por ciento. Por lo que se refiere a los gastos asociados a la conservación de la vivienda, el INE calcula que durante los últimos doce meses subieron un 5 por ciento. Respecto a marzo, los gastos aumentaron en abril un 0,6 por ciento y en lo que va de año un 3 por ciento. Por último, los seguros para la vivienda se encarecieron el 3,5 por ciento en un año y el 3,5 por ciento en los cuatro primeros meses de 2006, en tanto que sobre el mes anterior no variaron.
|W|P|114828747968957534|W|P|Los alquileres de la vivienda en España subieron el 4,3% en el último año, 4 décimas más que el IPC|W|P|cesar.villasante@gmail.comEsto supone elevar en 6 y 6,4 puntos porcentuales, respectivamente, el esfuerzo que tenían que hacer las familias españolas en 2005. Del informe se desprende, además, que este porcentaje es el más alto de los últimos 13 años, cuando los hogares españoles tuvieron que destinar el 53,4 por ciento de su renta a la compra de un piso. Sin embargo, el descenso de los tipos de interés en los últimos años ha moderado el aumento del esfuerzo, que en 2006 se situará, a pesar de los mayores tipos previstos, todavía por debajo de los niveles registrados en 1990 y 1991, cuando era necesario destinar el 67 y el 68,9 por ciento de la renta familiar a la adquisición de una vivienda. El informe destaca asimismo que las familias españolas tendrán que destinar 9,2 veces un salario anual al pago de una casa, cuando al cierre de 2005 tenían que desembolsar 8,47 veces un salario anual, lo que supone el mayor nivel desde que se dispone de estadísticas precisas para obtener esta relación. Para calcular el esfuerzo financiero necesario para comprar una vivienda, la inmobiliaria ha seleccionado un hogar teórico que percibe una renta anual equivalente al salario medio de unos 19.188 euros, que adquiere una vivienda con 90 metros cuadrados construidos (75 m2 útiles). El precio medio de la vivienda sería de 176.388 euros, lo que supone un aumento del 11,3 por ciento, y el préstamo hipotecario cubre el 80 por ciento del precio de venta del piso. El crecimiento salarial previsto para este año es del 2,5 por ciento y el tipo de interés medio de los préstamos estimado es el 3,85 por ciento TAE, al que corresponde un tipo de interés nominal del 3,78 por ciento, señala Metrovacesa. El estudio se refiere al esfuerzo correspondiente al primer año de vigencia del préstamo. El resultado es descriptivo del esfuerzo que tienen que hacer los hogares jóvenes que acceden por primera vez a una vivienda. Metrovacesa señala que en el caso de que los préstamos se formalizasen a 25 años, el pago de entrada, de alrededor de 35.300 euros, supone un desembolso adicional significativo para los jóvenes. Por ello, recalca la inmobiliaria, es necesario que se consiga un grado importante de cumplimiento del Plan de Vivienda 2005-2008. En el informe de coyuntura, Metrovacesa estima que los precios de la vivienda libre -nueva y usada- continuarán desacelerándose de forma gradual, de manera que se situarán en el entorno del 5 y 10 por ciento al final del año, frente al 12,8 por ciento de 2005. La inmobiliaria que preside Joaquín Rivero prevé que el volumen de viviendas iniciadas será similar al de 2005, con unas 720.000 pisos, mientras que crecerán las viviendas terminadas por encima de las 600.000. Dentro de la oferta de nuevas viviendas podrían crecer este año las viviendas protegidas, a la vista de que la construcción de este tipo de pisos se ha ido consolidando en los planes locales de urbanismo. Además, Metrovacesa prevé que las compraventas de viviendas se mantendrán en 2006 con un aumento moderado, en torno al 5 por ciento, con lo que se superarían el millón de operaciones.
|W|P|114707543794279602|W|P|Los hogares españoles destinarán entre 45,5% y 52,4% de la renta a la compra del piso|W|P|cesar.villasante@gmail.com